Ella sonríe, como si todo estuviera bien, como si nada doliera, como si por nada llorara. Pero en realidad, nada está bien, intenta encontrar un lugar, un refugio lejos del mal. ¡Se desmorona! Nadie lo nota. ¡Todos la juzgan! Se desmorona, en la profundidades de un abismo desconocido, pero a la vez tan familiar. ¡Ahí nació! Tal vez ahí muera. En un abismo, un laberinto, prometiendo una salida. ¡Le mintieron! Se desmorona, como la galleta que llevas a tu boca, para devorarla. Así la angustia la devora, sin aviso, sin piedad. Se desmorona, mientras sonríe, contagiando a los demás de su alegría. Nadie la entiende. Nadie la mira. ¡Invisible! Se desmorona, entre los brazos de cualquier persona, en busca de amor. No puede cantar su canción. Se le ha ido la voz, por callar un sufrimiento. Reprimida. Aislada. ¡Se desmorona! Algún día ya no estará, y será cuando todos, querrán amarla,mirarla y mimarla. El tiempo no alcanzara. ¡Se desmorona!